Publicado
hace 7 años,
Hoy en día prestarse dinero de manera informal puede llegar a ser un dolor de cabeza, o peor aún, desencadenar una extorsión de parte de prestamistas extranjeros quienes solo buscan tener más víctimas.
El portal formal de préstamos online www.holaandy.com ha identificado cinco motivos para no acceder a préstamos informales, a continuación se lo hacemos saber.
1. Chantajes y extorsiones. Muchas veces el boca a boca conlleva a solicitar dinero a un prestamista que no se conoce. Esta situación puede provocar que cualquier peruano lidie con mafias extranjeras que ofrecen prestar dinero sin garantías, exponiendo a quienes lo soliciten a ser víctimas de violentos métodos de cobros, extorsiones y hasta la muerte.
2. Tasas altísimas. Muchas veces a través de esta modalidad se accede a pagar tasas que superan el 20% o el doble del dinero prestado, generando un desbalance financiero para quien lo solicite.
3. Abuso. Al ser un negocio altamente rentable para los prestamistas informales, estos tienden a abusar de la ingenuidad y circunstancias del solicitante haciendo que las personas no se puedan librar de la deuda fácilmente.
4. Endeudamiento. Los prestamistas informales muchas veces buscan la manera de extender el plazo de pago a los solicitantes, con tasas de morosidad que superan lo acordado inicialmente, complicando aún más la situación de quienes lo solicitan.
5. Pagos diarios o semanales. Por lo general este tipo de modalidad ofrece que los pagos sean semanales o diarios, lo que no permite llevar una ordenada situación financiera. Es mejor pagar de manera mensual y de acuerdo a los ingresos que se tiene. “Recurrir a este tipo de modalidad puede ser contraproducente a la vida de cualquier ciudadano que sin saber se expone a formas de cobro de manera violenta”, señaló Javier Castro, creador del portal.
Somos un equipo de personas que creemos firmemente en la necesidad de canales de información alternativos que proporcionen acceso al conocimiento y a las noticias que los grandes medios informativos tradicionales, a menudo, ignoran o distorsionan, para que los ciudadanos puedan tomar sus propias decisiones, informadas y en libertad.