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hace 7 días,
Aumento de sueldo de Dina Boluarte. La presidenta gana actualmente S/ 16,000 al mes, pero el Ministerio de Economía y Finanzas propone elevar su salario a S/ 35,568 mensuales. La iniciativa surge en plena crisis social, con protestas sin solución, descontento ciudadano y una presidencia con bajos niveles de aprobación.
¿Es este el momento para hablar de aumentos?
La Secretaría General de la Presidencia del Consejo de Ministros pidió al MEF un análisis técnico para establecer el salario correspondiente al cargo presidencial. En respuesta, el ministerio elaboró un informe que compara remuneraciones entre 13 mandatarios de América Latina. El documento ubica a Boluarte en el penúltimo lugar de la lista y concluye que su sueldo no se ajusta a la magnitud de su responsabilidad.
Según el análisis, otros jefes de Estado en la región perciben ingresos muy superiores. Por ejemplo, el presidente de Chile gana más de 100 mil soles mensuales, mientras que el de Brasil supera los 80 mil. Con un Producto Bruto Interno (PBI) per cápita de 7,910 dólares y una población de 34 millones de personas, Perú se encuentra en una posición intermedia en la región. Sin embargo, el salario presidencial se mantiene entre los más bajos. El MEF argumenta que esta disparidad afecta la lógica institucional y debilita el principio de jerarquía salarial dentro del Estado.
El informe también señala que Boluarte, a pesar de ocupar el puesto más alto del Ejecutivo, cobra menos que varios ministros y titulares de organismos autónomos. Desde una perspectiva técnica, la propuesta busca “alinear” su remuneración con la escala establecida en el Cuadro de Puestos de la Entidad (CPE) del Despacho Presidencial. La Oficina General de Recursos Humanos de la PCM avala este planteamiento.
Pero fuera de las oficinas públicas, el contexto pesa más que los tecnicismos. La mayoría de peruanos gana el sueldo mínimo de 1,025 soles. El aumento de sueldo de Dina Boluarte equivale a más de 34 sueldos mínimos. En un país donde la informalidad supera el 70% y la pobreza ha vuelto a niveles prepandemia, resulta difícil justificar una decisión así ante la ciudadanía.
A eso se suma el momento político. Dina Boluarte enfrenta una baja aprobación, denuncias por el uso de relojes de lujo, cuestionamientos éticos y una creciente desconexión con las demandas sociales. Mientras miles de ciudadanos marchan ante la inseguridad ciudadana, por servicios básicos y derechos laborales, el Gobierno discute internamente cómo duplicar el sueldo presidencial.
La pregunta no es si el análisis técnico del MEF tiene lógica. La pregunta es: ¿es este el momento correcto?
Porque en política, el mensaje pesa tanto como la cifra.
Y hoy, el mensaje suena más a privilegio que a justicia.
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