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hace 2 semanas,
La paciencia se agotó en el distrito de Pampas, Pallasca. Ante el abandono del Gobierno Regional de Áncash y la empresa Consorcio Jehová Jireh 2, los pueblos del Marañón convocan una movilización histórica para exigir la ejecución inmediata del Proyecto de Electrificación prometido.
En el corazón del distrito de Pampas, una nueva chispa de esperanza y lucha prende con fuerza. El Frente de Defensa y Desarrollo de los Pueblos de las Riveras del Marañón (Fredeprim), junto a su presidente Waldir Atanacio Carbajal, autoridades locales, organizaciones de base y la población organizada, decidieron alzar la voz y decir ¡basta!, frente a la indiferencia y el abandono, según comunicaron públicamente.
El pasado miércoles 23 de abril de 2025, en una asamblea extraordinaria celebrada en el caserío de El Porvenir, se consolidó una respuesta contundente ante la falta de compromiso del Gobierno Regional de Áncash, el Ministerio de Cultura y la empresa contratista Consorcio Jehová Jireh 2, principales responsables del estancamiento del Proyecto de Electrificación que beneficiaría a más de 16 pueblos del Marañón.
La indignación de los asistentes fue unánime. La falta de obras, las promesas incumplidas y las constantes excusas de los funcionarios regionales llevaron a los pueblos a organizar una gran movilización hacia las sedes del Gobierno Regional de Áncash, del Ministerio de Cultura y de la empresa Consorcio Jehová Jireh 2. La fecha está marcada: lunes 12 de mayo de 2025, partiendo desde el Puente Tablas en el desvío Uchupampa-Mongón, a las 11:00 a.m.
Esta movilización busca exigir una audiencia pública para esclarecer las negligencias y exigir respuestas concretas sobre la ejecución de un proyecto que no solo representa desarrollo, sino dignidad para cientos de familias.
En la misma reunión, se acordó impulsar actividades económicas para solventar los gastos de esta lucha justa. Así, se han programado campeonatos deportivos el 1 de mayo en Pampas, Pallasca, el 4 de mayo en El Porvenir y el 11 de mayo en Shañuque. Además, se ha hecho un llamado solidario a los pampasinos residentes en Lima, Chimbote, Trujillo y otras ciudades del país para apoyar esta causa histórica, recordando que en el pasado, su colaboración fue decisiva para impulsar grandes reclamos.
No solo la indiferencia del gobierno regional y nacional ha causado molestia. Durante la asamblea, el alcalde distrital de Pampas, Abraham Juárez Gabriel, fue duramente cuestionado por su falta de empatía y compromiso con la problemática de los pueblos del Marañón. Las críticas también alcanzaron a los jefes de área y al personal administrativo de la municipalidad, cuya ineficiencia ha sido motivo de creciente rechazo.
El Frente de Defensa, junto a las rondas campesinas, lanzó un ultimátum claro: si las autoridades municipales no rectifican su accionar con eficiencia, eficacia y sensibilidad social, se recurrirá a la justicia ronderil para sentar precedentes en defensa de los intereses del pueblo.
Pampas ha hablado claro: no se trata solo de electrificación, se trata de respeto, de dignidad y de futuro. Esta marcha no solo es una protesta, es un grito colectivo que resuena en cada caserío y centro poblado, recordando que la luz que hoy falta en sus hogares no apagará jamás la voluntad de un pueblo que sabe luchar por lo que le corresponde.
El lunes 12 de mayo será una fecha para la historia. La marcha del Marañón no será solo un reclamo: será el reflejo de un pueblo que nunca más permitirá que la indiferencia apague sus sueños.
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