Ancash: Orquesta Sinfónica “El silencio por conveniencia»

Hoy en el 2014, en tiempos en que la corrupción no paga, Laurencio Añanca, es el mismo fiscal que archivó el caso la Centralita en el 2013

Juan Calderon Altamirano, lider de JUNTOS POR EL CAMBIO

Por : Lizet C. Flores Milla

15/06/2014  Los ancashinos nos encontramos satisfechos por la caída de la corrupción en la región. Es motivo de otro debate y alternativas de solución inmediata la actual crisis de gobernabilidad por la que atravesamos. A pesar de ello, se vienen nuevos tiempos para nuestra región y es nuestro deseo que de toda esta película de terror vivida, nos quede a todos una gran lección como ciudadanos sobre la participación que la patria nos demanda día a día, en su momento, para contribuir siempre con una sociedad mejor.

Hoy cuando de pronto todas las autoridades dan cuenta de la corrupción regional, hoy cuando para todos los magistrados siempre si existía una organización criminal en Ancash, hoy cuando todos denuncian y apuntan lo que antes no hicieron por conveniencia, hoy del mismo modo, los miembros del Movimiento Regional Juntos por el Cambio siguen esperando que el fiscal Laureano Añanca explique porque en el 2013 archivó el caso «La centralita», motivo por el cual fue denunciado penalmente por el líder y candidato al gobierno regional de este movimiento, Juan Calderón Altamirano.

UN POCO MÁS DE LA HISTORIA

En el año 2011 Juan Calderón denunció a Cesar Álvarez Aguilar y otros funcionarios del GRA, por el caso «La Centralita”, como consecuencia de esa denuncia, la Fiscalía Provincial Corporativa en Delitos de Corrupción de Funcionarios del Distrito Judicial del Santa, emite la Disposición Nro. 09-2012, ordenando que se remita la investigación a la Fiscalía de la Nación de Lima.

En el año 2013, el Fiscal Laureano Añanca Chumbe, en el colmo del escándalo, archiva el caso la Centralita, motivo por el cual Juan Calderón Altamirano denuncia a este mal fiscal frente a la  Oficina de Control Interno del Ministerio Público, por los delitos de prevaricato y omisión de ejercicio de la acción penal.

Tuvieron que pasar aproximadamente dos años y medio para que finalmente se formalice la denuncia penal respectiva muy a pesar que Juan Calderón presentara evidencias en su debido momento.

Hoy en el 2014, en tiempos en que la corrupción no paga, Laurencio Añanca, el mismo fiscal que archivó el caso la Centralita en el 2013, pide detención preliminar de 18 meses contra los operadores de Alvarez Aguilar; entre ellos, periodistas, funcionarios y testaferros; parámetros que se consideran adecuados para quienes corren peligro de fuga y evidencian participación en la red de organización criminal regional.

Lo que causa sorpresa y extrañeza es que este mismo Fiscal haya pedido detención por el mismo periodo para el principal denunciante de este caso, Juan Calderón Altamirano.

SED DE VENGANZA O COMPLOT PARA BAJARSE CANDIDATURA REGIONAL

Lo más lógico es que si por fin los “grandes magistrados” se decidieron a investigar, citen a su principal denunciante como tal o en el peor de los casos como testigo. Y si finalmente consideran pertinente, la comparecencia restringida era la salida legal ¿no es así?

En la audiencia en la que se dictó detención preliminar para Calderón Altamirano, el fiscal acusador, no supo sustentar la carpeta fiscal de las motivaciones por las que se dictaba detención contra Calderón y en el colmo del escándalo ni siquiera contaban con ella en la audiencia. El fiscal acusador, argumentó bajo dichos, dimes y diretes la mencionada acusación. ¿De qué debido proceso hablamos señores magistrados? Lo que hicieron aquel día fue un total atropello y abuso del derecho.

EL GRAN PRETEXTO

A quienes están detrás orquestando todo esto: ¿Creen que los ciudadanos van a creer el cuento que no sólo hacen esto con Juan Calderón, si no que del mismo modo con otros periodistas desconocidos, que fácilmente podrían llevar el juicio en libertad? Eso era lo que querían verdad, encontrar un pretexto para meter en el mismo saco a todos y así poder arrastrar a Juan Calderón, porque es descabellado, por ejemplo, pensar que la detención preliminar para el «Caballito Justiciero» por 18 meses deba ser la misma para un par de periodistas que jamás se les vio hacer defensa sesgada para Álvarez en los canales comandos. En estos últimos casos no hay peligro de fuga y menos una participación comprobada, ellos tranquilamente podrían llevar el juicio en libertad.

Señores de la orquesta sinfónica «El silencio por conveniencia”: ¿Acaso Querían un pretexto para bajarse al principal denunciante del caso la Centralita y callarlo antes de que este  les enrostre públicamente verdades incomodas sobre su silencio cómplice en años anteriores?

Juan Calderón denunció a este Fiscal precisamente por haber archivado el caso que él valientemente denunció en el 2011.

Juan Calderón se equivocó al formar parte del Movimiento Cuenta Conmigo, pero se retiró a tiempo, demostró su ruptura total para con esta esfera al denunciar públicamente este sonado caso, el mismo que sentó el primer precedente para la caída de la corrupción en Ancash.

Sería mezquino, no reconocer que Juan Calderón en una época en que la vida no valía nada, tuvo la valentía de enfrentarse y denunciar formalmente a la mafia regional frente al Ministerio Público, Procuraduría y Contraloría General de la República.

Durante años se enfrentó a César Álvarez y funcionarios allegados; denunciando así, a Luis Fernando Arroyo Guevara en su calidad de Ex Director de Producción del GRA, por los delitos de colusión y enriquecimiento ilícito, como consecuencia, La Fiscalía de la Nación, emite la Disposición Fiscal Nro. 04-2013-MP-FN-EI de fecha 26 de Febrero del 2013, disponiendo formular cargos en contra.

Cuando el sicariato y la inseguridad reinaban en Ancash, Juan Calderón supo poner en evidencia la entera complicidad de sicariato y crimen organizado entre el Gobierno Regional de Ancash y el coronel Edgar Aguilar Amaro, contra quien ya corre investigación, pero que sin embargo no lo vemos detenido. Del mismo modo, denunció la compra irregular de patrulleros que el Gobierno Regional comprara en favor de la Región Huánuco, como consecuencia de esta denuncia la Fiscalía Provincial Corporativa en Delitos de Corrupción de Funcionarios del Distrito Judicial de Ancash, emite la Disposición Nro. 01 de fecha 11 de Noviembre del 2013, que dispone la Apertura de Actos de Investigación.

Por otro lado, denunció ante la Contraloría General de la República, por peculado y malversación  de fondos a Cesar Álvarez Aguilar y funcionarios allegados por el escandaloso caso de las obras paralizadas y el FORADO DE LOS 150 MILLONES EN ANCASH, como consecuencia La Controlaría General de la República, mediante  Oficio Nro. 00983-2013-CG/ORHZ de fecha 12 de Noviembre del 2013, inicia las investigaciones.

Durante años fue crítico de cómo el Gobierno Regional venía operando en las diferentes direcciones regionales, como consecuencia de ello formalizó denuncia por el escandaloso caso de negociados de medicinas en la DIRESA (Dirección Regional de Salud), del mismo modo denunció formalmente al Presidente del Directorio del Proyecto Especial Chinecas, Wilfredo Anticona, así también al Gerente General Elvis Camarena.

En aquellos tiempos, Juan Calderón tuvo que asumir los pasivos de atreverse a enfrentar a tremendo poder corrupto enquistado en la región y una de las consecuencias de su rebeldía fueron los constantes ataques, seguimiento, reglaje y atentados en su contra, César Álvarez, lo tenía en la mira e intentó muchas veces acabar con su vida.

Desde la centralita operaba toda la red criminal del Gobierno Regional, siempre lo dijimos de mil maneras, y jamás nos tomaron en cuenta. Nos preguntamos entonces ¿Dónde están los verdaderos responsables de que jamás se ajusticiara este caso y que los ataques, reglajes, seguimiento y muertes hayan continuado en nuestra región? ¿Dónde están los “tremendos magistrados”: Dante Farro, Peláez Bardales y Ramos Heredia? ¿En qué parte de las investigaciones figuran como denunciados? ¿Eso si no puede descubrir el famoso servicio de inteligencia? ¿O es que están esperando que sólo la presión social y mediática los obligue a no desviar las investigaciones de quienes no les conviene? Otorongo no come otorongo ¿verdad? ¿Temen que los tentáculos lleguen hasta la familia presidencial y por eso hasta hoy siguen moviendo fichas para no tocar a los intocables?

Hoy Juan Calderón se encuentra injustamente detenido por el caso la Centralita, sus abogados han presentado apelación que será resuelta en los próximos días.

Con todo esto: ¿Cuál es el mensaje que las seudas autoridades le transmiten a la población indignada que si se atreve a denunciar?

Juan Segundo Espinoza Linares (a) “El Caballito Justiciero»